La Alimentación del futuro es la alimentación inteligente
La Alimentación del futuro es la única alimentación que está totalmente actualizada en nuestros días, y es posible que en un futuro se convierta en el único requisito para la conservación de las cualidades humanas: la capacidad de seguir siendo seres humanos.
La Alimentación del futuro es una alimentación inteligente. Es una alimentación que no sólo ofrece una explicación de las diferentes características de los alimentos, sino que también destaca el hecho de que la comida no debe ser sólo consumida, hay que saber comer con placer y saborear.
La Alimentación del futuro se basa sobre diferentes frecuencias capaces de generar la energía, y no se basa solo en vitaminas, aminoácidos, proteínas, etc., todo lo que ha estado dominando los seres humanos de tiempos atrás.
La Alimentación del futuro es un sistema capaz de regular la geometría del ser humano y colocarlo en la geometría del espacio.
La comprensión de la nutrición del futuro es la capacidad para preservar la calidad humana y no caer en la mutación o ir por debajo de la influencia de las vibraciones de la conciencia superior. La Alimentación del futuro es relevante no sólo para el día de mañana, sino que también lo es para hoy. Por supuesto, para una persona que aún no ha entendido que es la alimentación en general, le será difícil aceptar la idea de la Alimentación del futuro.
La Nutrición es la ciencia de la alimentación, que en la actualidad está bajo la influencia de personas que en su mayor parte sólo pueden excitar al espacio con el tema de "qué hay que comer y qué no hay que comer”. Hasta que el ser humano no aprenda la geometría de la alimentación no conocerá la esencia de lo que come, por qué lo hace y para qué.
Aunque es importante tener una experiencia personal en el conocimiento de la nutrición, más importante es entender con que sistema se corresponde. Es fundamental ser capaz de analizar y no sólo depender de la opinión de alguien. Debemos enseñarnos a nosotros mismos a elaborar una actitud personal hacia la alimentación, en lugar de mirar a través del prisma de las propias reacciones.
¿Cuál es el principal problema para el hombre moderno? Es que el organismo no es capaz de asimilar los productos y centrarse en el sabor del producto. Los alimentos, junto con el aire, son la principal fuente de energía para los humanos. Es justamente la geometría del ser humano lo que permite asimilar uno u otro tipo de energía. La energía es principalmente una frecuencia aritmética. Y cada uno de nosotros está en cierto nivel de la escala. De conformidad con esa escala se forman diversas dependencias. La cosa más peligrosa es cuando nuestro nivel baja.
Desde los tiempos antiguos la alimentación ha sido definida con esta escala, porque gente podía percibir las frecuencias más altas. En pocas palabras, la gente podía alimentarse más con el aire, es decir, con la energía del espacio y no con las cosas que este espacio produce. Y esto fue considerado como la alineación de la fuerza del lugar donde vivía la persona. Los alimentos que se comían estaban en consonancia con las ideas de la actividad solar y dos veces al año, la energía podía manifestar al máximo sus propiedades a través de los cereales o de los animales - en el periodo donde la tierra llenaba al máximo el espacio.
La geometría del espacio determinaba a la idea de la alimentación, y ésta vinculaba al ser humano con la energía de la fuerza. Los primeros que violaron esta ley fueron Adán y Eva, ellos fueron los primeros en comer la comida mortal. Aquí debemos comprender los conceptos de la comida "mortal" y "no mortal". La reducción del potencial energético, que llegó con la comida "mortal", llevó hacia un enorme consumo de productos que no sólo no daban la energía, sino que también la quitaban, activando temporalmente la energía humana. Como resultado, el ser humano comenzó a reaccionar sobre la cantidad y no sobre el sabor.
El hombre empezó a comer en cantidad, hasta llegar al estado que esta cantidad lo aplastó, en lugar de comer poco pero bien. Pasó a depender de la energía que tiene carácter temporal. El hombre se olvidó como consumir la energía de alta frecuencia. Como resultado se formó una creencia que la comida que come le da el poder.
Las personas consumen alimentos, la comida los satura y ellos dicen que obtienen energía de la comida. Esto ya es una ley que forma una mentalidad enfermiza. El ser humano rompió la cadena biológica y empezó a demostrarse a sí mismo como se debe vivir. Hoy nos sorprendemos cuando muchas personas se envenenan, y no nos resulta pasmoso como se pueden consumir alimentos de tan baja calidad e innecesarios. Por ejemplo, la gente se contamina con alimentos de mala calidad y la mitad del pueblo termina en el hospital. Por supuesto, no es bueno. ¿Pero cuando la mitad del pueblo comía estos alimentos impuros, qué pensaban? El organismo no puede percibir lo no verdadero, modificado, podrido y simplemente perjudicial.
Por ejemplo, en el avión siempre preguntan: "¿Quiere jugo de naranja o de manzana?". Y la persona contesta: "De manzana" o "de naranja", pero del paquete con el jugo le sirven una bebida química, que disuelve el esmalte de los autos. ¡Se trata de la percepción del ser humano: le sirven cualquier cosa y él cree que toma jugo de manzana! Hablando del agua, hay que decir que ya no queda mucha en el planeta, y la mayoría de la gente ya no sabe como hay que tomar el agua y entender el sabor del agua.
Ahora nos enfrentamos a dos problemas. El primero es la ciencia que no existe, por la sencilla razón que las personas que trabajan con la ciencia y tienen derecho a hablar de ella, en la mayoría de los casos no la necesitan. Y el segundo problema es que aquellos, quienes realmente saben algo, no son profesionales, porque no tienen suficiente experiencia. Ellos sólo declaran algo y es un intento de llamar la atención de la gente, pero una tentativa declarada no llevará a ninguna parte, se necesita un esfuerzo.
La alimentación dejó de cumplir su función principal: nutrir el cerebro. Y ¿qué significa alimentar el cerebro? Significa crear en sí mismo un conjunto de características de alta frecuencia. Las glándulas que están en la cabeza producen las frecuencias superiores en nuestro cuerpo, y pueden percibir las frecuencias que consumimos (por ejemplo, la esencia de la perlas: 130 Hz, la esencia de turmalina: 250 Hz). ¡Lo siento, pero nosotros comemos alimentos con la frecuencia más baja del punto de entrada del intestino grueso!
La alimentación mortal tiene 7 niveles, desde el repollo hasta la carne. Por ejemplo, una persona comió carne. Disminuye la frecuencia, la energía no sube al cerebro y luego al revés, se dirige al sistema digestivo. Como resultado, el cerebro se simplifica.
Lo primero que debe aprender un niño es la cognición del gusto. Hoy están cambiadas todas las modulaciones en los niños, que no pueden y no saben determinar el sabor de la comida. Y los adultos a su vez son capaces de tomar el agua que llegó no se sabe de dónde. Pero el agua mineral no es sólo una bebida, es un alimento real. Para mostrar a una persona un nivel normal de consumo de agua, se necesitan tres meses de preparación, que hay que pasar tomando buena agua permanentemente. Es imposible porque el cuerpo comienza a resistirse que le den una buena agua. Pero el mercado tiene poca agua buena.
¡Miren lo que pasa en los supermercados, incluso los que tienen dinero ponen en su carro de compras cualquier basura! El ser humano se deforma a sí mismo con esta alimentación, que de hecho, no tiene sabor. La persona toma jugos que no son jugo, toma agua que no es agua o lleva productos lácteos, que conducen al deterioro de varios sistemas del cuerpo. Pero el agua nutre el cerebro.
Además, hay diferentes tipos de personas que tienen habilidades para asimilar o quemar todo esto. Por lo que resulta que aquellos quienes por naturaleza tienen más potencial energético terminan haciendo un enorme favor, llevándose a si mismos y a otros en la dependencia de desgastar los alimentos, experimentando un tipo especial de emociones. Como resultado, se forma una ideología entera, que puede ser descrita como "¿voy a devorarme?".
El hombre es un organismo complejo. Lo más peligroso es cuando está dividido. Cuando los sistemas del cuerpo no están vinculados entre sí, cada sistema pide su alimentación. Veremos, por ejemplo, el sistema muscular. Imaginemos que comienza a oprimirse por alguna causa. Lo más importante es que comienza a requerir energía. El consumo de los alimentos dará esta energía, pero recibida del desgaste de la comida y no de ella directamente.
Por ejemplo: Usted da una botella de vino a un hombre alcohólico. ¿El será feliz? Para él lo peor es lo mejor. Esta es la posición de su hígado o de su corazón. Su cuerpo está confuso, porque no está regulado. Esto se elabora dentro de nosotros cuando se rompe la disciplina de la alimentación y aparece la falta de atención que debemos poner en la alimentación. Y estas violaciones se producen, especialmente a nivel de diversos ácidos, que reaccionan no sólo a los alimentos, sino también a toda la motricidad de nuestro cuerpo. Como resultado, el hombre moderno ha desarrollado una enfermedad cuyo nombre es "Sensación de hambre". Se produce cuando no hay integridad interna, cuando el gusto ha dejado de ser una unidad de alimentación. Y si no regulamos esta unidad, entonces no regulamos la comida.
La Alimentación se determina con una medida bastante simple: con la energía que reside en ella. La Alimentación "mortal” es comida, definida por la geometría del lugar donde vivimos, es la comida que temporalmente nos mantiene. Las características de la frecuencia de estos alimentos es que son inferiores a 8 Hz. El siguiente tipo de comida es la comida energética. Es la comida con características de frecuencia de 8 a 25 Hz. Nutre ante todo, a nuestro cerebro, y a través de él al cuerpo. El tercer tipo de alimentación es la de alta frecuencia, es la alimentación con cristales cuya frecuencia es de 30 a 500 Hz. Y eso es lo que sucede: el conocimiento sobre los alimentos que usa la sociedad moderna es el conocimiento de primer nivel, cuando nos enseñan como consumir profesionalmente la "alimentación mortal".
En esta categoría de alimentos hay indicadores. Si definimos nuestra alimentación como "alimentación mortal", es necesario ver si en ella están las vitaminas necesarias, oligoelementos, aminoácidos, proteínas, etc. Ya nos hemos acostumbrado a ver la comida desde un punto de vista del perjuicio. Pero aún así hay una gran violación en esa nutrición defectuosa. También debido a los cambios físicos: ha cambiado la geografía del espacio, aumentaron las frecuencias, e incluso con estos indicadores, la comida que nosotros seguimos consumiendo, ya no tiene las características de la naturaleza. Ha cambiado la frecuencia y la comida que tenemos ya no está orientada para mantener la conciencia y el cuerpo enfermo, sino para la destrucción de ambos.
Sin embargo, no puede negarse que cualquier fuente de alimentación igual tiene energía y, cuando se utiliza correctamente, sabiendo como consumir o preparar determinada alimentación, podemos igualmente trabajar con el sabor. La Alimentación básica puede darnos el sabor, y esto es el impacto básico energético que está por encima de nuestra alimentación. Y aquí podemos corregir nuestro estado, porque la alimentación energética se ubica por encima de la naturaleza del sabor; ni hablar de los cristales.
El sabor es una característica de la frecuencia. Podemos mejorar las posibilidades de alimentación, consumiendo el sabor y no la masa. A veces todo se cambia en nuestro reino. Y esto es algo que todos pueden permitirse a sí mismos, mientras reciben la alimentación básica, pero entera y energética. Porque concentrándonos y sintiendo el sabor, obtenemos un mayor número de las cuotas y energías, que si sólo comemos en cantidad. Esto es una gran e importante tarea que está delante nuestro: comenzar a nutrirnos y obtener placer con los alimentos que consumimos.
Sin embargo, orientándonos sobre el gusto, no deberíamos comer más de una vez al día. Comer significa crear una carga adicional sobre nuestro cuerpo. Además, por supuesto, hay que saber nutrirse con los líquidos. Configurando correctamente nuestro cuerpo, podemos elaborar nosotros mismos todo lo que necesitábamos. No podemos hacerlo ahora, porque el trabajo del cerebro está trastornado. Nuestro organismo no tiene un centro de distribución y de recepción de la energía. Así que si se desea entender el tema de la nutrición, hay que desarrollar la conciencia.
La principal educación básica en nutrición es aprender a nutrir el cerebro. Nuestro cuerpo y nuestro cerebro necesitan agua, el agua real. Se puede purificar el agua, se puede enriquecer el agua, pero no se puede crear una estructura dentro del agua. Se forma sólo con los procesos naturales. El Agua estructurada es el agua que tiene un cierto nivel de pH y una determinada gama de minerales.
Para el ser humano sano normal el pH debe ser de 5.5-6.8. Un pH de más de 7 es entorno alcalino que está destinado a personas enfermas. Pero el pH correcto no es suficiente si no hay un conjunto específico de minerales.
El agua debe convertirse en el primer producto energético. ¡El líquido debe ser correcto! Se puede decir que debe ser honesto. Hay que entender que el líquido que consumimos forma nuestra mentalidad de alimentación. La cosa más peligrosa en un líquido son los aditivos, por ejemplo el azúcar. Con el azúcar nosotros no sólo empeoramos el líquido, sino también nuestra sangre. La influencia sobre el cuerpo pasa a través de la sangre, que cambia bajo la influencia del mismo azúcar y produce cambios en nuestro cerebro. El cerebro debe depender principalmente de los canales energéticos y no de la sangre. Hay que purificar la sangre, de lo contrario no se presenta la posibilidad de sublimar el proceso.
Así, el primer tipo de alimentación está relacionado con los productos naturales, con la cuestión del gusto. No hay que comer demasiado, hay que recibir el placer por comer.
El segundo tipo está asociado con la energía de los alimentos. Naturalmente, no podemos permitirnos la alimentación energética. La alimentación energética sólo se encuentra en los lugares donde la frecuencia es más alta en comparación con el lugar donde vive el individuo. Si vivimos en Moscú, entonces tengamos en cuenta que su frecuencia 7.9 Hz. Por lo tanto, necesitamos alimentación energética de más de 8 Hz. Por ejemplo, veremos el producto energético Shatavari. Se utiliza en el rejuvenecimiento y restauración de la piel. O también la gacha de quinoa, es un producto energético. El aceite de oliva también es un producto energético, pero no tiene que ser refinado.
La alimentación energética es una alimentación relacionada con ciertas características de frecuencia que permiten afinar a nuestra energía. Se trata de alimentos que mantienen el tono en nuestro cuerpo. Lo más importante es saber combinar estos alimentos. El aceite de oliva y la gacha de quinoa tienen indicadores leves, pero determinan el fundamento de la alimentación energética. Lo más importante es minimizar la mezcla de la comida energética con la "comida mortal", a menos que tengamos el objetivo de crear un sabor específico.
Y, finalmente, el tercer tipo de alimentación es la alimentación con minerales. Lo que durante muchos años fue el destino de los elegidos y tenía una comprensión ambigua en la sociedad, con el advenimiento de las nuevas tecnologías se volvió una realidad. La alimentación con minerales tiene una larga historia. Empezando por los maestros taoístas y los alquimistas medievales, las personas intentaron conseguir la destilación, el elixir de cristales. Pero hoy se ha convertido en posible gracias a las nuevas tecnologías. Y todo gracias a una única familia de Suiza, que abrió el camino a otra dimensión de existencia para toda la gente.
¡En Suiza lo hicieron: consiguieron alimentación a partir de los cristales y se la puede consumir! ¡Este alimento alcanza la frecuencia de 300-400 Hz! ¡Es una frecuencia interplanetaria! Está claro que no todos pueden subir a esas alturas para asimilar la energía, pero esto crea enormes perspectivas, porque da una oportunidad para activar el cerebro y configurarlo. Lo más importante es ser capaz de aplicar correctamente productos tan finos. Aunque hay productos de cristal más simples, como la miel o momia (lagrimas de las montañas), hongos especiales. Se puede acostumbrar a uno mismo a los minerales con los productos hoy disponibles. Pero se debe saber que no toda miel es beneficiosa. Es importante donde se originó y cuanto tiempo tiene. Para una persona sana no se recomienda comer miel joven, o sea, una que no tiene más de 3 meses. Esta miel comienza a "comer" a la persona y se recomienda para las personas enfermas para devorar a la enfermedad.
Preguntas y respuestas
Si el organismo humano no estuvo hecho principalmente para recibir la alimentación mortal, para que tenemos este sistema digestivo complejo y voluminoso, ¿cuál es su función además de la digestión de los alimentos?
El sistema se desarrolló en el tiempo. Además, cada uno de los órganos digestivos elabora su propio producto, que se incluye en la interacción del aire con los alimentos. Así que todos estos recipientes y vasos son muy necesarios.
La alimentación correcta es necesaria para nutrir el cerebro y aumentar la frecuencia de la existencia. ¿Entonces en qué medida es importante interactuar (utilizar como alimento o sentir la frecuencia) con la piedra que corresponde a la constelación zodiacal?
Todas las piedras corresponden a diversas proyecciones del espacio. Las piedras astrológicas no siempre son espaciales y buenas para el fortalecimiento de su propia naturaleza. Tenemos que transformar la naturaleza para mejorarla. Así que es mejor basarse sobre el objetivo de las piedras y no sobre la propia correspondencia con esta piedra. Aunque uno no excluye lo otro. Por ejemplo, para nutrir el cerebro es muy bueno utilizar la piedra Sodalita. Es posible usarlo como alimentación mediante la obtención de extracción de cristal, que hace Willy Bruner. Es importante saber concentrarse cuando va a tomar este producto. Y no comer nada una hora antes y una hora después. Si hablamos sobre la utilización de la piedra en su forma pura, hoy la humanidad perdió la capacidad de interactuar eficazmente con cristales.