El Arma biológica
El arma biológica es la destrucción del genoma del genoma. Es un material genético relacionado no tanto con los padres de la persona, como con la memoria hereditaria de la tierra, que participa en la concepción de cada ser humano a través de cierto Campo Integral (el ADN del macrocosmos). Al tratar de determinar la información genética del hombre según su ADN, los investigadores pierden la posibilidad que se les da de conocer el Código genético o consideran un código a algo que no lo es.
Sin embargo, precisamente al ADN está dirigida la acción de un gran número de estructuras, muchas de las que ni siquiera se dan cuenta qué hacen. De esta manera apareció el VIH, Ébola y muchos más. Al que comprende el ADN será capaz de destruir grupos étnicos enteros y lo único que pude hacerlo frente es el perfeccionamiento del código de la etnia. Y la posesión de los códigos de este tipo dará poder a cualquier gobierno un gobierno. En esto, de hecho, consiste la fuerza de Rusia donde cada etnia debe comprender la importancia de la unión.
Basta solo con que destaque una etnia pura y de inmediato podrá ser dañada biológicamente y eso no es tan difícil. Pero, por otro lado, esto implica también el perfeccionamiento de todos los códigos, el espíritu de la etnia. En este caso, lo más importante es conservar los lenguajes nacionales, porque no se debe privar a los pueblos nacionales de su lengua materna. A los mismos hay que orientarlos a la comprensión de su propio código, es decir estudiar el idioma como una anatomía. Además, el desarrollo de la música verdadera étnica es un elemento principal en la enseñanza que permite mantener al individuo sintonizado con su código o simplemente conocerlo.
Una persona que perdió la conexión con su código cae en el caos de la existencia. Y lo peligroso en este caso es que estos códigos pueden ser conocidos por alguien quien sintonice a cualquier etnia con la destrucción sin el uso de ningún tipo de arma. La fuerza del ser humano es inherente a su código que es el genoma de su genoma. Es el espíritu verdadero del hombre. Y todo lo que nos distrae de nuestra respiración, la alimentación normal, ya es un daño de nuestro espíritu y vale la pena considerarlo como un arma biológica. Al consumir todas las bebidas químicas, frutas modificadas, etc., el ser humano moderno dejó de alimentarse normalmente y más reacciona a la comida. Por lo tanto, es ridículo decir que los alimentos que se venden en la actualidad contienen algún recurso natural en su mayor parte.
14 noviembre 2017
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