Longevidad

VII. La alimentación de la vitalidad

Al estudiar la cuestión de la longevidad, hay que aclararse los conceptos presentes acerca de este tema. Una cosa es percibir como matusalén a gente llena de diferentes tipos de “detergentes químicos”, de cuya personalidad no ha quedado nada, otra cosa es estudiar, por ejemplo, los matusalenes de Cáucaso y tercera diferente es comprender qué entienden bajo este concepto, digamos, los chinos. También existen grupos étnicos que no consideran en serio el tema de la duración de la vida en absoluto, lo que pasa en India, África o América Latina donde el enfoque principal es la vida después de la muerte.

Resulta que podemos considerar la longevidad ya sea como intento de prolongar la vida (por así decirlo, en el formato europeo), ya sea desde el punto de vista del fortalecimiento de la vitalidad (el punto de vista del concepto taoísta). La diferencia consiste en que en la comprensión europea todo se percibe técnicamente: quién cuántos años vive, mientras que en el concepto taoísta, esto es una oportunidad para la persona de crear la fuente adicional de energía para la realización del Camino. Es decir, la longevidad se considera como una posibilidad adicional de incrementar la vitalidad, la energía para transformarla en un cuerpo inmortal.

La longevidad en la comprensión taoísta es una posibilidad práctica de cambiar el Código de nuestro destino. En el caso del europeo, en ese sentido nada cambia y la persona solo realiza la equivalencia energética inherente. Y sólo, por así decirlo, en el “caso caucásico”, uno puede tener inherente escasa duración de la vida, pero al trasladarse a otro lugar más “energético” capaz de nutrir a la gente, puede provocarse una prolongación de la vida. En este caso es importante darse cuenta de que lo que pasa se debe a la sustitución de la energía del lugar.

Así que, soñemos lo que soñemos por longevidad, el único camino que nos ofrece un verdadero proceso de prolongar la vida a través del incremento de la vitalidad es la Tradición Taoísta. El resto de la percepción de este proceso tiene condicionalidades independientes de la voluntad humana.

En cuanto a ese tema, para comprender cómo incrementar la vitalidad, debemos concebir conscientemente y desarrollar la percepción de las condiciones que influyen en la longevidad.


Puede conocer la completa versión del material en el Artículo “
Nutrir la vitalidad” y en el libro “Longevidad” cuya edición estamos preparando.

 

   891  

Haga una pregunta


Sólo usuarios registrados pueden postear preguntas. Iniciar sesión.

Para registrarse click aquí..



top