Alquimia Integral

V. La Tabla de Esmeralda

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La Tabla de Esmeralda es la fórmula de nuestro espacio, representada por el Decimosegundo Campo Integral, en que cristalizan todos los conocimientos, la información, relacionada con nuestro espacio. Es el lugar donde vive la consciencia suprema también llamada la Consciencia de Esmeralda.

En el Decimosegundo Campo Integral se refleja la vida de todas las espirales de la Tierra. Las espirales de la Tierra son resonadores, que determinan todos los procesos temporales en el Campo temporal, los procesos intemporales en el Campo intemporal y en el Campo del espacio que no depende del tiempo. Es decir, se trata de tres etapas del desarrollo del cristal, la esmeralda.

O sea, son trece ondas tonales que forman la escala energética del Universo, donde el decimotercer tono se organiza gracias a la interacción de todos los doce tonos.

Cada Campo se determina por una onda. La onda tiene un significado peculiar en la comprensión de la materia. Entonces, recién podemos hablar del Primer, Segundo, Tercer o Cuarto Campo, que representan la materia.

La onda se determina por la transformación cunado la materia interactúa con el éter, que justo creó la ciencia llamada Alquimia. En este caso se trata del Quinto, Sexto, Séptimo y Octavo campo, cuando lo material se conecta con lo no-material. Por ejemplo, tenemos una ropa y la llenamos mientras la llevamos, o sea, se añade el volumen energético entre el objeto y la forma. Entonces ésta se convierte en parte de la forma.

En el siguiente modelo espacial, la energía ya no está atada a la forma rústica, digamos, sino que está atada al espacio. Se trata de los Campos Etéreos Noveno, el Décimo, el Decimoprimero y el Decimosegundo. El Decimotercero está más allá del espacio tridimensional.

O sea, podemos decir que la onda puede depender, digamos, de la ley de la gravitación, pero puede que no dependa. En este caso se trata de la interacción entre el Segundo, el Tercer y el Cuarto, Campos.

Y es lo único que puede ser conocido en la escala macro-cósmica vista desde la posición de los valores absolutos, que es la base del conocimiento, o sea, Las Tres Claves para descodificación y la comprensión de la Tabla de Esmeralda.

Condicionalmente, cada onda puede perderse en su movimiento y entonces decimos que es temporal, pero puede también transformarse o, lo más sorprendente, aspirar infinitivamente a algún lugar. Por eso podemos hablar de cuatro direcciones en la vida de la oda. Por eso tenemos una forma donde podemos conocer la onda.

La onda que se amortigua

Es una onda que posee determinado ángulo de retorsión. Si la medimos en grados, entonces el esfuerzo de la captura del círculo se inicia en el ángulo igual a 30 grados, que es el límite para la amortiguación de la onda.

Por lo tanto, la onda que tiene hasta 30 grados es una onda amortiguada, mientras que el ángulo en 30 grados es ángulo de la medida donde se forma el tiempo.

Es decir, el Campo obedecido a la existencia de la energía de la Tierra es el Segundo Campo, que es el de la muerte, el Campo con vitalidad temporal amortiguada.

Pero todos los cálculos temporales e intemporales poseen ángulos que se amortiguan. La diferencia consiste en que en los cálculos intemporales se trata de la transición de una onda a otra con la pérdida parcial de la energía o con su completa transformación. Así, resulta que el segundo ángulo que se amortigua está atado a los procesos temporales sin destruir nuestra vitalidad y está listo para desarrollarla tanto mediante los procesos temporales, como a los intemporales. O sea, se trata de un ángulo que posee resonancia positiva. Está ligado al espacio intemporal que está posicionado en la escala de los ángulos entre los 90 y 120 grados.

El tercer ángulo que se amortigua representa los procesos intemporales dentro del espacio temporal (180—210 grados). En este espacio la energía se genera parcialmente y ata a los espacios temporales.

Los procesos espaciales que se amortiguan están en el cuarto ángulo, en la zona de la amortiguación, ángulos iguales a 330—360 grados, donde la energía se transforma completamente.

El orden diferente de amortiguación y activación se forma por el Primer, Cuarto, Séptimo y Decimosegundo, Campos.

Es decir, en las leyes de la conservación tenemos un valor temporal básico, llamado Primer Campo Integral. Este Campo regula los tres ángulos del espacio temporal. La primera “placa base” es la Tabla, mientras que el Cuarto Campo lleva más allá de los límites de lo material y se realiza la amortiguación, la terminación de los procesos temporales.

El Cuarto Campo Integral, o la Cuarta placa base de la Tabla, regula la salida más allá de los valores temporales que se amortiguan. Éste existe en las leyes de la abertura, del despliegue de la salida de las leyes de las formas. En el Cuarto Campo Integral se apoyan los valores intemporales. Es el Campo intemporal del Primer orden, que se basa en el espacio tridimensional, que tiene resonancia positiva que genera energía de las ondas temporales.

El Campo intemporal del Segundo orden se forma por los ángulos de 180—210 grados. Posee la resonancia negativa, que forma la energía desde las condiciones de la acumulación del campo temporal e intemporal en el espacio temporal de acción. En esta resonancia se construyen los conocimientos de la Alquimia. El campo intemporal se apoya en el espacio de cuatro dimensiones o, mejor dicho, en la dirección que lleva a los procesos intemporales y espaciales. Asimismo, lleva a la terminación de los procesos intemporales en el campo temporal.

Y, al final tenemos el cuarto ángulo que se amortigua, que lo lleva todo a valores espaciales completamente diferentes. Es el Decimosegundo, el que lo lleva todo a su origen . Es el ángulo igual a 330—360 grados.

De esta manera obtenemos el primer orden de conocimientos, o sea las ondas necesarias para la extinción de los cuatro valores espaciales. Se trata de ondas que dan la dirección.

La onda que genera

Vamos a considerar los valores generadores donde se están desarrollando los cuatro tipos de la energía, o las espirales de nuestro espacio. Otra vez se trata del segundo campo, el esfuerzo o el proceso, que lleva a la destrucción. Éste genera también la corriente opuesta de la energía. Es decir, hablamos del tipo de energía, que nuestro planeta más necesita.

El regulador principal entre los procesos temporales e intemporales en nuestro espacio es el Quinto Campo, que conecta la energía intemporal con la temporal.

El Octavo campo completa la formación de la influencia de la energía intemporal en la temporal.

En este Campo se completan en su totalidad los procesos temporales y el espacio empieza a depender sólo de la tensión. El campo Decimoprimer debe solo empaquetar el espacio para el cambio y la transición a otro plano diferente o para preparar la energía para retornar.

En el primer caso, le ayuda el Décimo Campo que lo libera de la energía que se amortigua.

Así, quedan el Tercer, Sexto y Noveno, Campos. Son campos geométricos que son campos temporales espaciales, ondas, que pueden ser inscritas en el triángulo; el Sexto campo es intemporal, cuyas ondas se inscriben en el cuadrado y el Noveno campo espacial, cuyas ondas se inscriben en el círculo.

Es decir, desde la posición de la integridad es importante el ángulo decimoprimer que representa el Decimoprimer Campo, que pasa al ángulo decimosegundo. Éste orienta toda la matriz o al retorno, o a la transición al Campo Decimosegundo.

De esta manera se forma el conocimiento de la Tabla de Esmeralda.

Lea más sobre el tema en el libro “Alquimia Integral”

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